El presidente Hugo Chávez murió a consecuencia de un «infarto fulminante» en medio de una ardua batalla de casi dos años contra el cáncer, afirmó el jueves el jefe de la guardia presidencial, el general José Ornella.
Ornella, quien estuvo con Chávez los dos últimos años de la vida del mandatario, dijo a laAP que Chávez hasta el último momento estuvo aferrado a la vida, pero que «un infarto fulminante» precipitó su muerte.
«No podía hablar, pero lo dijo con los labios, ‘Yo no quiero morir, por favor no me dejen morir‘. Porque él quería a su país, se inmoló por su país», agregó.
El alto oficial expresó que a pesar del esfuerzo de sus médicos -que aseguró eran los «mejores» de todas las partes del mundo-, el cáncer, que «estaba bastante avanzado«, venció al mandatario.
«Sufrió bastante. Nosotros, que estábamos al lado, (vimos que) sufrió mucho esa enfermedad. Y bueno, la historia la escribiremos, y algún día alguien escribirá y algún día, el médico escribirá«, agregó.
Dijo que desde el pasado 8 de diciembre, cuando Chávez habló al país por última vezpara informar sobre la reincidencia del cáncer y que debía someterse a una nueva intervención quirúrgica, «él sabía que después de esa operación había muy poca esperanza de que saliera«.
Los médicos del presidente nunca hablaron sobre su paciente, ni se ha sabido hasta ahora qué tipo de cáncer padeció ni qué órganos afectó exactamente, más allá de la «zona pélvica».
El mandatario falleció la tarde del 5 de marzo en un hospital militar del oeste de la capital, donde estuvo internado por casi dos semanas luego de retornar de Cuba.
Chávez había permanecido en La Habana por 70 días tras ser operado el 11 de diciembre por cuarta vez desde que declaró en junio de 2011 que padecía la enfermedad.
La condición de salud de Chávez comenzó a complicarse a inicios de semana debido a un «empeoramiento» de la función respiratoria y a una «severa infección«, de acuerdo con un comunicado leído por el ministro de Información, Ernesto Villegas.
Durante el proceso de postoperatorio, Chávez sufrió una infección respiratoria que luego devino en una insuficiencia respiratoria que no logró superar. Como parte del tratamiento de la insuficiencia, el gobernante estuvo respirando por varias semanas a través de una «cánula traqueal» que le dificultó el habla.