Colin Fielder, de 39 años de edad y residente en el estado de Victoria, en Australia, estuvo clínicamente muerto entre 40 y 60 minutos, hasta que una nueva técnica de reanimación del Hospital Alfred de Melbourne lo devolvió a la vida, según publica el diario ’Herald Sun’.
El australiano Colin Fielder le debe su vida a una máquina. Con 39 años, este hombre ha resucitado gracias a una nueva y revolucionaria técnica de reanimación desarrollada por una máquina que realiza compresiones torácicas contínuas y mantiene el flujo de sangre y de oxígeno hacia el cerebro y los órganos vitales, lo que disminuye el riesgo de discapacidad permanente.
El nuevo método de reanimación se ha utilizado en siete pacientes, y ha logrado reanimar a tres de ellos, que llevaban clínicamente muertos una hora o más. Según fuentes del hospital, ninguno de los tres pacientes reanimados con este sistema sufrió discapacidad cerebral permanente.