Una enfermera del Centro Médico Universidad de Toledo, en el estado de Ohio, Estados Unidos, tiró a la basura por error un riñón de un donante vivo que iba a ser trasplantado a su hermana mayor. El accidente en el hospital estadounidense ocurrió el pasado mes.
Los médicos del centro hospitalario intentaron «resucitar» el órgano, pero fue imposible. Era irrecuperable.
La familia de donante y receptora no quiso arriesgarse a utilizar el riñón dañado, así es que la enferma forma parte ahora de la larga cola de pacientes que esperan un riñón compatible en el estado de Ohio.
El hospital ha realizado más de 1.700 trasplantes renales desde 1972
El director del Centro Médico Universidad de Toledo, Jeffery P. Gold, ha calificado el incidente como «desafortunado».
El hospital ha suspendido su programa de trasplantes de riñón, del que ha apartado a dos de sus enfermeras y en el que se ha abierto una investigación para esclarecer lo sucedido.
Gold afirma que el hospital ha pedido ayuda a expertos de dentro y fuera del centro para averiguar qué ha podido suceder y cómo se podrían prevenir incidentes como este.
Según informa ABC News, el Centro Médico Universidad de Toledo ha realizado más de 1.700 trasplantes renales desde 1972, con un índice de éxito del 98%.
Un portavoz del hospital ha asegurado el hospital reanudará los transplantes de riñón en las próximas semanas.
Fuente: http://www.abc.es