Cinco tips con lo que no hay que hacer, las herramientas que pueden ayudar y algunos ejemplos de distintas formas de elaborar contraseñas seguras
1. Las palabras que no se deben usar
No utilizar combinaciones obvias, como letras del teclado que están pegadas. Los ejemplos más comunes serían “qwerty” o “1234”. Como están registrados entre las contraseñas más utilizadas, son las primeras que prueban los hackers, según Marion Merritt, de Norton Security, consultada por Yahoo News.
2. Usar una contraseña diferente para el mail
Es el password más importante de todos, porque el resto de los sitios web que requieren contraseña la envían al mail en caso de olvido. Entonces, si a alguien le hackean el correo tiene serios riesgos de que le roben el resto de sus claves.
3. No utilizar el mismo password dos veces
Casi todo el mundo lo hace, pero es muy riesgoso. Una vez detectada una clave, los delincuentes informáticos intentarán entrar con ella al resto de las cuentas del mismo usuario.
4. Usar un password manager
Son programas que generan claves únicas que cumplen con todas las medidas de seguridad. Como están en la nube, permiten crear y utilizar nuevas contraseñas desde cualquier computadora. Además indican en qué cuentas fueron utilizadas cada una de las claves, lo que evita olvidos.
5. Ejemplos de contraseñas efectivas
Una posibilidad es elegir una frase que uno nunca olvidaría y tomar la primera letra de cada palabra. Lo bueno de esa estrategia es que permite crear una palabra que no va a estar en ninguna base de datos.
Fuente: http://america.infobae.com/