Rowena Buxton-Henderson dejó de comer cuando entraba en su adolescencia. Bastó el comentario de una enfermera que le dijo que debía bajar de peso, porque estaba gorda. Esto fue suficiente para traumatizarse e imponerse un régimen severo que la llevó a sobrevivir diariamente con una manzana y una taza de té. Esa fue su alimentación durante años, según publicó el Daily Mail. …
Leer más sobre »