El gobierno uruguayo, que busca legalizar la compraventa de marihuana para combatir el narcotráfico, lanzará una campaña para alertar sobre los riesgos de su consumo, en la que recomendará que se coma o inhale en lugar de fumarse. El secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Julio Calzada, explicó que el gobierno apunta a una campaña de salud para alertar sobre los riesgos del consumo de la droga y ofrecer pautas para minimizar sus daños de la misma manera que se hace con el del alcohol y el tabaco.
“Este es un trabajo que debe hacer todo gobierno, dar a los ciudadanos una percepción adecuada de los riesgos que tiene el uso de determinadas sustancias; trabajamos para un uso responsable del alcohol, por ejemplo, para minimizar los daños que causa, y la marihuana no escapa a esto”, indicó el funcionario, según reportó la agencia de noticias EFE.
Calzada precisó que el Estado “no recomienda que se consuman sustancias que hacen daño, pero sí informa sobre las actitudes menos arriesgadas al hacerlo”.
Al respecto, advirtió que fumar marihuana genera daños similares para la salud que el consumo de tabaco, que daña los pulmones, y que por eso se apunta al consumo oral o inhalado, para evitar estos problemas.
“Hay que dar la información de que todo lo que se consume de forma vulcanizada (quemada) tiene un riesgo enorme para el aparato respiratorio; la gente tiene que tomar decisiones informadas”, insistió.
Por otra parte, el presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Jorge Ruibal, consideró en una entrevista periodística que el Estado debería dar “marihuana gratis” a los adictos a cambio de que estos se inscriban en un registro para ser tratados y evitar al mismo tiempo que “roben o vayan al mercado negro”.
Ruibal, máxima autoridad judicial del país, defendió el proyecto de legalizar la droga del presidente uruguayo, José Mujica, y apuntó que su “intención no es mala” pues pretende “combatir el narcotráfico y la agresividad de drogas como la pasta base, que están al alcance de cualquier ciudadano”.
También apuntó a la necesidad de alertar de que la marihuana no se fume, sino que se inhale o se consuma a través de alimentos.
Para el magistrado, “lo esencial es que el adicto se registre”, para lo cual el Estado deberá llevar un control sobre quienes son los consumidores, actualmente estimados en unos 300.000, de los cuales entre 127.000 y 150.000 son jóvenes.
Uruguay debate desde mediados del año pasado un proyecto impulsado por el Ejecutivo para legalizar la marihuana y hacer del Estado el único responsable de su producción y venta, con la idea de combatir el narcotráfico y alejar a los consumidores del mercado negro, en donde se distribuyen sustancias más peligrosas.
Mujica ordenó en diciembre una pausa en la discusión del proyecto en el Congreso, debido a encuestas que indican que 64% de la población lo rechaza, reseñó la agencia de noticias Ansa.
No obstante, el tema será una de las prioridades del gobierno para 2013, según lo aseguró el prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa.
El proyecto fue presentado por el gobierno en agosto y avanzó en la Comisión de Adicciones de la Cámara de Diputados, donde ya se definió, por ejemplo, que el Estado tendrá el control de todas las fases de producción y comercialización de la marihuana.