Pasos para lograr tu primer ahorro

Seguramente usted verá un contexto actual en Argentina en el que invertir y ahorrar se está tornando un tanto difícil. Los controles de cambio, un mercado de capitales que opera volúmenes sumamente bajos y presenta escasas herramientas de inversión para el ahorrista y un Gobierno que con sus decisiones aleja cada vez más al ciudadano de las finanzas son tres factores que invitan inevitablemente a trazar un plan B.

¿A qué nos referimos con esto? Encontrar un modo de juntar algunos billetes que le permitan, al menos en el corto a mediano plazo, tener un dinero ahorrado que le dé tranquilidad de cara al largo plazo.

Ahorrar sus primeros 100 mil billetes (pesos o, mejor, dólares) no es un camino fácil, y más teniendo en cuenta la dificultad de acceder a ellos. Pero como dice el logo de una reconocida marca de ropa deportiva: “nada es imposible”. Si usted es una persona que lleva un pobre registro de su presupuesto y sus gastos, es momento de empezar a ahorrar. Toda su energía debe estar canalizada en la búsqueda de este objetivo.

Es así que le acercamos algunos pequeños errores que solucionándolos puede empezar a ahorrar de manera exitosa.

Tome café en la oficina

Empecemos con gastos simples. Si usted se toma un café en la mejor tienda de café en el barrio de Palermo o Recoleta, reduzca ese gasto. Suponga que usted gasta AR$ 20 por día en la tienda del logo verde y redondo; si usted suprimiera ese expendio, estaría ahorrando AR$ 7.200 anuales y quizás más si es que usted tiende a acompañarlo con un muffin, una cookie o prefiere tomar un café más caro. En 15 años juntaría 100 mil pesos y en 30 años 200 mil pesos. Si arranca a una edad temprana podría estar retirándose a los 60 o 65 años con una buena suma que le permitiría vivir sin pensar en su jubilación baja.

Salud y finanzas, de la mano

Y eso si sólo cuenta el café. Hay muchos gastos que pueden reducirse y hasta suprimirse. Si no vive a una distancia muy grande del trabajo, puede tomar como rutina ir caminando –o en bicicleta- a trabajar. Según expertos de la medicina, caminar al menos media hora por día ayuda a la capacidad cardiovascular del ser humano. Es así que, por un lado, logra ahorrar un montón de dinero en transporte –que vista la situación de los subsidios podría seguir aumentando- y por el otro hace ejercicio y mejora su condición física.

Establezca objetivos de ahorro de corto plazo

Usted puede planear objetivos cuyo plazo de vencimiento sea a un año, un mes o para dentro de una semana. Por ejemplo, puede proponerse juntar un dinero para una inversión conservadora, como puede ser un plazo fijo o una pequeña propiedad que le dé una renta. Propóngase ahorrar entre 500 pesos y 1.000 pesos mensuales y a fin de año puede tener una suma de entre 6 mil pesos y 12 mil pesos.

Pedro es un joven de 25 años que vive con sus padres y tiene un sueldo que le permite ahorrar dado que es un adulto-joven. Si saca los 1.000 pesos que dijimos anteriormente, para sus 30 años va a tener 60 mil pesos y para sus 40 años una suma cercana a 180 mil pesos. Como habrá visto, un objetivo de corto plazo que era ahorrar unos mil pesos por mes, se transformaron en ahorros de casi 200 mil pesos. Ahí usted decidirá, invertir en mercado financiero, comprar una propiedad y alquilar, entre otras opciones, para poder aumentar esa suma inicial.

Un ingreso extra nunca viene mal

Si usted además de su sueldo tiene alguna habilidad que le podría permitir generar un dinero extra, aprovéchelo. Algo que no le demande mucho tiempo. Puede dar clases particulares, hacer trabajos freelance o ser administrador de la casa de un extranjero, trabajo que no le demanda más que hacer algunos controles de gastos y estructura de la vivienda (no es fácil de conseguir pero si lo logra es un acierto inmejorable). También está el hecho de entrar al mundo de las inversiones, puede capacitarse previamente para luego poder entrar a los mercados por cuenta propia. Invertir su dinero en especialización y educación financiera puede llegar a ser su mejor apuesta. No sólo hablamos de acciones, el mundo de las inversiones tiene un amplio abanico. Es cuestión de abrirlo y aventurarse.

Como habrá visto, son todos gastos y técnicas simples y comunes. Pero si realmente se pone a hacer cálculos sobre la cantidad de dinero que se le va por todas esas actividades rutinarias o innecesarias, el número seguramente podría sorprenderlo. Y no olvide las opciones de inversión que hay, pero debe buscarlas: la capacitación es un paso importante, pero la determinación de buscar negocios ya debe ir por cuenta propia.

Fuente: http://www.igdigital.com