Meditación fácil para una vida saludable

Los estudios han demostrado que la meditación puede incrementar la inmunidad, eliminar las emociones negativas, disminuir la presión arterial y reducir los efectos del stress. A diferencia del uso de medicina prescrita, no tiene ningún costo y carece de efectos secundarios.

 

Pero, ¿Cómo sabemos dónde y cómo empezar? En busca de respuestas, iVillage entrevistó a la Dra. Joan Borysenko, PhD, profesional en el rubro de la meditación por casi 40 años.

Toma la decisión y sigue estos sencillos consejos para iniciar tu rutina de meditación. ¡Los resultados no se harán esperar!

Cuándo meditar
De acuerdo a la Dra. Borysenko, necesitamos meditar al menos 10 minutos al día para comenzar a obtener beneficios.

Diez minutos pueden parecer fáciles de conseguir, pero en nuestra cultura de trabajos múltiples, encontrar ese tiempo puede ser realmente difícil. Este es, sin duda, el primer obstáculo para el ejercicio de una práctica regular.

 

¿La solución? Simple: pregúntate cuál es el tiempo mínimo con el que te puedes comprometer a meditar. La Dra. Borysenko afirma que aunque tu práctica sea sólo de cinco minutos, te mantendrá sentada para empezar.

Una vez que comiences, lo disfrutarás y entonces tomarás cinco minutos más.
La Dra. Borysenko recomienda la meditación tan pronto cuando despiertas. Fija la alarma, evita la cafetera y ve directamente a tu práctica, explica.

Una vez que enciendes la cafetera, enciendes luego el televisor para escuchar las noticias y cuando menos te lo imaginas estás absorbida en otras cosas.

Cómo comenzar a meditar
Una vez que estás fuera de la cama, busca una silla de respaldar recto. El problema físico más común que las personas enfrentan es que sus cuerpos no experimentan relajación sin quedarse dormidos, explica la Dra. Borysenko

Sentarse al borde de una silla dura con la columna a unas pulgadas del respaldar es una buena manera de alejar al sueño.

Para comenzar la meditación, deja que tus ojos se cierren. Centra tu atención en el sonido de tu propia respiración, que es la forma más fácil en que un nuevo estudiante puede meditar, según la Dra. Borysenko.

Deja que tu vientre se expanda en la inhalación y se contraiga en la exhalación, esto permitirá que la respiración sea más profunda al interior de tus pulmones y promueva los efectos fisiológicos de la relajación.

Cada vez que tu mente empiece a vagar  y sucederá, así que no seas tan dura contigo misma cuando te des cuenta que ocurre otra vez, regresa suavemente al sonido de tu respiración.

En conclusión
Esta sola acción de centrarte en tu respiración por 10 minutos al día es más que suficiente. La mayoría de la gente hace que la meditación se torne demasiado complicada, afirma la Dra. Borysenko.

Piensan que deben levantarse a las 4:30, hacer media hora de yoga, media hora de meditación y realizar cierta lectura edificante.

Cuando todo esto llega a ser extenuante, revierten la rutina y deciden hacer nada.

 

Aprender a mantener una práctica simple nos puede ayudar a idear maneras para que nuestras recargadas vidas también sean menos complicadas.

Fuente: http://msnlatino.telemundo.com