En un tremendo suceso, un individuo de 42 años asfixió a su indefensa hija de apenas 8. Las autoridades judiciales consideran que el sujeto habría asesinado a la criatura para vengarse de su ex esposa y madre de la nena, de quien se había separado recientemente. Este horrendo caso se descubrió en la localidad bonaerense de Villa Concepción, en el partido de San Martín, y los pesquisas detuvieron preventivamente al sospechoso, quien habría agredido a la pequeña en una vivienda en Martínez.
Voceros judiciales señalaron que la infortunada chica, llamada Milagros, fue trasladada de urgencia al Hospital Manuel Belgrano, en avenida Constituyentes al 3100, de San Martín, donde los médicos, tras revisarla, comprobaron que estaba fallecida.
La historia, que tiene escalofriantes ribetes, comenzó en horas de la noche del domingo pasado, cuando el acusado, identificado como Julián Arakaki, retiró a su hija, de 8 años, y a sus hermanos, de la vivienda de su ex mujer, situada en un complejo habitacional situado en el cruce de Mendoza y Pueyrredón, en la zona conocida como Villa Zagala, a unos 400 metros del límite con el partido de Vicente López, en el noroeste del conurbano provincial.
El hombre se hallaba separado de su pareja, Elizabeth Farías, y ambos habían acordado un régimen de visitas de las criaturas.
Trascendió que, al finalizar la jornada, el individuo trasladó a los chicos en un remís, hasta el domicilio de la mujer. Al arribar a la finca, Elizabeth, consternada, observó que su hija de 8 años estaba desvanecida y, al no poder hacerla reaccionar, decidió llevarla, en el mismo rodado de alquiler, al Hospital Manuel Belgrano.
Una vez en el nosocomio, los facultativos determinaron que la menor había perdido la vida y acto seguido avisaron de la situación a los integrantes de la comisaría de Villa Concepción, quienes de inmediato alertaron del episodio al doctor Sergio López, fiscal de la Unidad Funcional Nº 7 del departamento judicial de San Martín.
El funcionario dispuso la realización de la autopsia (aparentemente no presentaba lesiones visibles) y entonces se logró establecer que la niña había sido asfixiada.
Por dicho motivo, el fiscal resolvió la detención preventiva del padre.
Los pesquisas creen que el feroz crimen fue perpetrado en el domicilio de Arakaki, ubicado en calle Pueyrredón al 100, en jurisdicción de la localidad bonaerense de Martínez, en el partido de San Isidro. Una vez consumado el homicidio, el sujeto introdujo el cadáver de Milagros en el remís y se lo llevó a la vivienda de su ex compañera.
Un detalle que llamó poderosamente la atención de los servidores públicos fue que Arakaki acompañó a Elizabeth al citado centro asistencial, con el cadáver de la niña en el remís, presumiéndose que efectuó tal acción para despistar a las autoridades.
Se estima que el sujeto asesinó brutalmente a la inocente niña por despecho, pretendiendo vengarse de su ex pareja.
Según manifestaron los informantes, el sospechoso fue alojado, por razones de seguridad, en los calabozos de la seccional de Villa Lynch (3ª de San Martín).
Al respecto, los investigadores reconocieron que el caso tiene ribetes muy confusos.
Fuente: http://www.cronica.com.ar/