Zachary Tennen tiene 19 años. Cursa el segundo año de la carrera de periodismo en la Universidad de Michigan. Según la crónica que publicó The Huffinston Post, participaba de una fiesta estudiantil en Lansing, capital estatal, cuando dos jóvenes, que se identificaron como miembros del Ku Klux Klan, le preguntaron si era judío. Su respuesta positiva le valió una feroz paliza.
Luego de realizar el tradicional saludo nazi y gritar “¡Heil Hitler!”, lo golpearon y torturaron. Y para rematar su inexplicable violencia, le cosieron los labios con una grapadora metálica. Tennen perdió el conocimiento. Ninguna de los 20 testigos que presenciaron el ataque lo ayudó. Cuando se despertó estaba tirado en el suelo y lleno de sangre. Pidió un taxi y fue al hospital. Según informó KSDK, se está recuperando.
«El crimen cometido contra Zachary Tennen fue el más cruel en los últimos 11 años«, consideró la vocera de Liga Antidifamación (ADL), Betsy Kallman.
“Es vergonzoso que en el Siglo XXI en nuestro país exista tal odio religioso. Nadie debería experimentar el horror que yo he experimentado», escribió, de su lado, Tennen, en un mensaje enviado a la agencia Associated Press.
Fuente: http://america.infobae.com