El insólito episodio ocurrió en Tucumán, donde un grupo de delincuentes irrumpió en una casa, maniató a sus ocupantes y se llevó un jugoso botín. La policía llegó al lugar pero no pudo detenerlos por falta de recursos
El hecho se produjo durante la madrugada del sábado en el paraje El Empalme, donde está ubicada la casa de la familia Isa, propietaria de la principal empresa de colectivos de la zona.
Un grupo de malvivientes rompió el portón de entrada de la vivienda; instantes después reventaron la puerta con una garrafa y entraron a la habitación de Clara y Oscar Isa, los dueños de casa.
Tras maniatar a los mayores que estaban en al domicilio (entre ellos, un sereno identificado como Adrián González), los ladrones comenzaron a requisar la casa y recolectaron dinero y objetos de valor, como cámaras fotográficas, filmadoras, teléfonos celulares, ropa y zapatillas.
Mientras esto sucedía, el sereno logró desatarse y llamó a los vecinos; uno de ellos alertó a la comisaría de Ranchillos, pero se encontró con una sorpresa: los agentes le dijeron que no tenían patrullero, entonces el hombre debió ir a buscarlos con su propio auto para acercarlos al lugar.
Según relata el diario La Gaceta, cuando advirtieron que había llegado la policía, los delincuentes rompieron una ventana lateral y salieron de la casa, mientras se enfrentaron a balazos con los efectivos de seguridad.
El fuego cesó rápidamente y el final fue insólito: los asaltantes pudieron huir tranquilamente por la Ruta 320, debido a que los dos uniformados sólo tenían cinco balas cada uno y no contaban con un móvil apto para la persecución policial.
«Estamos agradecidos con la actitud valiente de los policías. No les reprochamos a ellos. Pero la comisaría tiene que tener un móvil. Nosotros somos trabajadores, tenemos nuestra empresa, y queremos que nos den seguridad», reclamó Clara (la dueña de casa) a las autoridades. Increíble, pero real…
Fuente: http://www.infobae.com