Siempre llega la hora en que todos se van de la oficina y uno tiene que terminar «ese» trabajo que tiene que estar listo sí o sí a primera hora de la mañana. Para estos casos, lo mejor es poner un par de buenos discos y por qué no, una cerveza sobre el escritorio, total, ya nadie está en la oficina y es una forma de hacer más grato ese momento que puede traernos un poco de mal humor.
Entre presupuestos, presentaciones, monitores de computadoras, cafés (o nuestra cerveza), y luces de tubos fluorescentes que ya nos atrofian la cabeza, nada mejor que buenas canciones de fondo de Jane Birkin, Martin Rossiter, un poco de sonido lounge y algo de bossa muy especial. A escuchar y teclear.
Un trabajo que tiene un par de años de la estrella erótica de los 60′. Jane Birkin, cada vez más lejos de ser solo la esposa del genio pop francés Serge Gainsbourg, en un excelente trabajo en el que interpreta un desfile de canciones entrañables, que indaga en su pasado y presente.
Hay composiciones de Tom Waits, Kate Bush, Neil Young, The Divine Comedy, entre otros. Temas dolorosos como My Secret de Beth Gibbons y baladas con mucha calma comoSteal me dream de The Magic Numbers, hacen que este disco sea una obra notable
Jane nunca fue una gran cantante, pero ella tiene algo de mágico, que hace que cada tema que interpreta se sienta desde adentro. También sabe codearse de los mejores músicos y arregladores, que hacen que cada nuevo disco, sea mejor que el otro. Ella se despegó definitivamente de ser el símbolo sexual que era de joven y ahora está más simple y despojada que nunca, solo carga con un barril de talento sin igual y puede, con su voz un tanto quebrada y de niña, hacer una canción de
Tom Waits y que suene formidable al igual que una de Rufus Wainwright.
En este álbum hay joyitas en ingles como Waterloo Sunset, Mother Stands for Comfort o Alice.
Fictions es uno de esos discos para escuchar de principio a fin, en donde encontraremos a una Jane Birkin de un talento intacto y de una seducción que derriba el paso del tiempo. Ella, como el vino, cada vez se deja gustar más. Y hablando de vinos, no está nada mal una copa para trabajar con Birkin al lado.
Tom Jobim Lounge – Varios Artistas
A principios de los años 90′ se abrieron espacios en Londres pensados para los jóvenes ejecutivos que después de una jornada agitada de trabajo, les permitieran relajarse lejos del tumulto de los pubs que antes solían frecuentar. Así fueron apareciendo restaurantes y bares con una decoración muy cuidada que invitaba al relax; despojados, con onda minimalista, comida muy sabrosa, gente bonita y buenos tragos. Estos parecen ser los ingredientes para que un lugar tenga ambiente llamado Lounge. Así también se denominó a un estilo de música, que por supuesto se escucha en estos espacios que asumen características de «casi» perfectos.
Tom Jobim Louge no es una recopilación más de temas clásicos del maestro de la Bossa Nova,es un disco muy particular, que resulta la compañía ideal para dejarse llevar con ensueño por los juegos del Chill Lounge, y lejos de la locura agotadora de lo cotidiano en las grandes ciudades.
El álbum fue arreglado por Lincoln Olivertti, quien ha trabajado con Joao Gilberto, Gilberto Gil, Gal Costa y Ed Motta, entre otros. Dj Grego es quien hizo las mezclas y remixes, hombre que también metió la púa en algunos discos de Wyclef Jean, Kid Abelha y Mariah Carey.
El trabajo del Dj Grego le da un particular estilo al disco, creando variaciones, algunas más aceleradas, otras mucho más tranquilas, y utilizando samples, en esta colección de los mejores sucesos de Tom Jobim, junto a las voces de los artistas más interesantes de la escena musical brasileña actual.
Sofisticación y tranquilidad, con mucha batida justa de electrónica, hacen una mixtura casi perfecta, en un disco distinto, donde hay una búsqueda de algo diferente en versiones de canciones como clásicos.
Entre los temas más logrados encontramos Corcovado por Daniela Mercury, Luiza por Carlinhos Brown, Insensatez por Paulo Ricardo, Eu sei que vou te amar por Paulinho Moska, y Sem Vocêpor Leila Pinheiro.
Tom Jobim Lounge es sin duda un estilo de música que junto a la gastronomía, la literatura, la arquitectura y la moda, complementa un nuevo movimiento cultural de estos tiempos.
Cibelle – Cibelle
Cibelle es una joven de San Pablo, una de las artistas más originales de la escena musical en la actualidad, que hace algunos años está viviendo en Londres, lo que la llevó a editar y producir sus trabajos en esa ciudad,
Ella estudió música desde muy niña en Brasil, donde también escribió poesía, y se empapó en el universo del video arte, donde además actúa.
Este es su primer disco, Cibelle, fue ovacionado por la prensa especializada. Después vinieronAbout a Girl (2004); y The Shine of Dried Electric Leaves (2006), que fue comparado conVespertine de Bjork por la sutileza electrónica y su poesía.
Magistral disco, Cibelle, tiene la línea de mezclar la Bossa, el Samba, así como el jazz y la batucada con una exquisita dosis de electrónica.
Las once canciones del disco abren con Deixa, una primera invitación al placer de la buena música envuelta en un sonido extremadamente fino, donde los toques de percusión y samba aparecen en el aire y acompañan de fondo muy suave y sutil la voz de Ciebelle. El resto de las canciones continúan con las mismas propuestas, bien cantadas, sin perder el alma de la música más brasilera, incluso en las que canta en ingles.
Só Sei Viver no Samba es una de las mejores canciones del disco, un cóctel del Samba y la electrónica susurrando como saudade acariciando nuestros oídos.
La hermosa paulista dejo atrás su trabajo como modelo y ahora es una brillante artista aclamada sobre todo en Europa.
The Defenestration of Sr – Martin Rossiter
Martin nació en 1970 y es inglés, fue un tanto popular por ser el vocalista de la banda británicaGere, tras la separación de la banda en 2004. Martin tomo nuevos rumbos y formó otra agrupación llamada Jolete, que lo llevó a seguir componiendo de forma solista y para su banda; también es el director de los Estudios ATM.
En diciembre pasado lanzó su trabajo discográfico solista, The Defenestration of Sr Martin, que para muchos fue uno de los mejores discos del 2012. Esta vez despojado de instrumentación, su voz solo suena junto al piano, logrando un trabajo que sorprende por la delicadeza que logra Rossiter en cada una de las canciones.
Martin se nota es un exiliado de la industria musical y ahora hace lo que realmente le da la gana y lo hace de una forma diferente y totalmente opuesta a lo que una compañía discográfica quisiera para lanzar un debut solista.
Ya eso es un premio por si solo para Martin, después viene el placer de los cuarenta y cinco minutos que dura este álbum.
La voz de Rossiter resulta totalmente diferente a la banda Gere, acá la mayoría de las canciones son un tanto autobiográficas, todas tienen un gran dosis de melancolía, pero transmiten una cierta intimidad que es difícil encontrar en un artista en la actualidad.
En canciones como Where there Are Pixels habla de la oportunidad de conocer a alguien, después de una separación y aventurarse a una nueva aventura, cuando uno ya no es un veinteañero. Drop Anchor narra lo que le pasa al ser humano al dejarse llevar, a la espera, a estar enamorado y poder vivirlo plenamente. Casi todas las canciones de este álbum dicen «algo», son todas de mucha sensibilidad, algo que hace que éste sea quizás un trabajo imprescindible para quienes lo descubran. Se está anunciando que llega un segundo disco, con más instrumentos, pero por ahora traten de disfrutar del trabajo con esta música de fondo.
Fuente: http://www.conexionbrando.com