Luego de la masacre en la escuela primaria de Connecticut, el mandatario yanqui subrayó en una conferencia de prensa que el país «pasó por demasiadas tragedias como ésta en los últimos años» y que deben hacer lo necesario «para que no vuelva a pasar».
«No reaccioné como presidente, sino como padre», reconoció Barack Obama en una conferencia de prensa tras enterarse de la matanza en la escuela primaria de Connecticut, en la que fueron asesinadas 27 personas, entre ellas, 20 nenes.
«Hemos pasado por demasiadas tragedias como ésta en los últimos años», subrayó un conmocionado Obama, que llamó a los ciudadanos norteamericanos a unirse más allá de las diferencias políticas.
«Nuestros corazones están devastados. La mayoría de los fallecidos son niños de entre 5 y 10 años. Tenían una vida por delante: cumpleaños, graduaciones, bodas», señaló el mandatario.
A los sobrevivientes, Obama les aseguró todo su apoyo en el difícil momento que están atraviesando y admitió: «Tenemos que tomar medidas significativas para que esto no vuelva a suceder».
Secándose las lágrimas de los ojos, el presidente cerró la conferencia: «Hoy a la noche Michelle y yo haremos lo mismo que harán todos los padres: abrazar a sus hijos, aunque hayan padres que ya no lo puedan hacer».
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