Gracias a su testimonio y a imágenes de las cámaras de seguridad de la terminal de ómnibus, el agresor fue identificado.
La víctima, de 21 años, trabaja como voluntaria en la Iglesia Anglicana y fue engañada por el chofer quien la llevó a una zona aislada para cometer el ultraje.
Una joven de 21 años de nacionalidad suiza que trabaja como voluntaria en la Iglesia Anglicana de Salta denunció haber sido violada por un taxista, en una zona próxima al monumento al General Martín Güemes, uno de los sectores turísticos de la capital provincial.
La mujer presentó la denuncia durante la madrugada de ayer ante la comisaría primera de Salta, donde describió con precisión al agresor, un chofer de taxi de unos 30 años que ya habría sido identificado y los investigadores estimaban que sería detenido en las próximas horas.
De acuerdo con su relato, la joven subió a un taxi en inmediaciones de la terminal de ómnibus de la capital y pidió al conductor que la llevara a un shopping de esta ciudad, informó el diario El Tribuno.
La joven, que habla perfectamente español, dijo haber entablado conversación con el conductor, a quien le comentó que debía realizar unas compras antes de partir de regreso a su país, pero este, sostuvo, le ofreció darle un paseo durante unos minutos por un sector de la ciudad que ella no conocía.
Una vez en la zona del tradicional monumento, situado al pie del cerro San Bernardo, el taxista llevó al vehículo hasta un sector aislado y la violó, afirmó la mujer en su denuncia.
La joven afirmó también que su agresor usó un preservativo que arrojó a la calle tras la agresión, el que luego fue encontrado por los investigadores donde había indicado la denunciante.
El jefe de Policía Marcelo Lami aseguró al diario local que se obtuvo «el video de las cámaras de seguridad de la terminal» que ayudó a la identificación del hombre quien, sostuvo, sería detenido «en cuestión de horas». Por otra parte, se informó, un médico policial habría constatado la existencia de signos de ataque sexual en la víctima.
La joven suiza estaba trabajando de manera voluntaria en obras que la Iglesia Anglicana lleva adelante en esta provincia. Este es un nuevo caso de ataque sexual que es denunciado por mujeres extranjeras en los últimos meses en Salta, ya que anteriormente una joven estadounidense y una mexicana habían advertido de situaciones similares.
Pero el más grave ocurrió en julio pasado cuando dos turistas francesas fueron brutalmente violadas y asesinadas en la quebrada de San Lorenzo, a 12 kilómetros de esta ciudad.