Lisa es una mujer nacida en Detroit que posee una adicción bastante particular, pues goza comiendo pelo de gato.
Según informa Planetacurioso.com, la mujer de 43 años sagradamente come tres bolas de pelo de gato a diario. Un dato no menor es que desde que comenzó a comer vello acumula más de 3.200 mechones de pelusillas.
Lisa comenta que es realmente grato el pelo de su gatito. Confesó que no aguanta más de 2 horas sin comer su cabello, de hecho lo compara a un algodón de azucar.
Asimismo, a veces come el pelo que se haya quedado atrapado en el peine del gato, Lisa puede lamer y besar a su gato como si fuera su madre.
Fuente: http://www.cronica.com.ar/