Un hombre se dirigió por ese medio para denunciar el abuso sexual de su descendiente de 13 años, en la provincia de Santiago del Estero. La policía busca el abominable responsable del suceso.
“Amigo, ¿pueden venirse a mi casa? Han violado a mi hija de 13 años…”.
El breve sms fue enviado por el padre de la supuesta víctima a un policía de la comisaría 32, ubicada en Nueva Esperanza, departamento Pellegrini, en la provincia de Santiago del Estero.
Debido a la gravedad de la noticia, partió una comisión hacia La Soledad, paraje distante 150 kilómetros de Nueva Esperanza.
Extraoficialmente, se supo que la policía mantuvo otros diálogos con el padre de la menor y todo indicaba que el abuso existió.
La Soledad es una geografía un tanto inhóspita, adelantó una fuente policial.
Se sabe que el padre se encontraba muy acongojado. En minutos, la superioridad facultó a policías y médicos, a fin de que viajaran a La Soledad y pudiesen cumplir con todas las medidas de rigor.
Esto es, interrogar a los protagonistas, también eventuales testigos, pero también realizar un análisis médico preliminar, básico para iniciar una investigación por abuso sexual.
De ser necesario, la comisión trasladará a la adolescente (incluido algún familiar) para que reciba atención en un centro de salud, adelantaron los voceros al diario El Liberal.
Por estricta solicitud de la jueza Lucrecia Martínez Llanos, los funcionarios policiales trabajarán el tiempo que sea necesario en La Soledad.
Luego, recibirán indicaciones sobre las decisiones que la Justicia resuelva, con la víctima y él o los eventuales sospechosos, adelantó un vocero ligado a la incipiente investigación.
Fuente: http://www.cronica.com.ar/