«En uno de mis viajes compartimos con un grupo de alemanes que sólo se comunicaban en inglés. Uno de mis compañeros no entendía y fue una situación difícil, ya que debíamos traducirle. Lamentablemente se perdía de esos momentos mágicos en que todos ríen, y cuando te traducen, el chiste ya no tiene gracia. No me hubiera gustado estar en esa situación», cuenta Cecilia García, diseñadora industrial de 28 años que tiene como pasión el viajar.
Es indiscutible: hay que estudiar inglés, porque se ha convertido en el idioma de comunicación por excelencia, permitiendo una fácil relación con personas de otros países y no sólo eso, es fundamental a la hora de encontrar trabajo, de ingresar a universidades de todo el mundo, acceder a importantes materiales de estudios, e indispensable al momento de hacer negocios.
Con un inglés intermedio avanzado, Cecilia afirma que este idioma «te da la posibilidad de conocer culturas y formas de ver la vida completamente diferentes a la tuya. Para lograr esto y aprovechar al máximo los viajes, hay que aprenderlo».
El mercado nacional cuenta con una amplia oferta para aprender el idioma, con sistemas que van desde las tradicionales clases grupales o profesores particulares; hasta métodos más novedosos como el e-learning o el blended learning, método que combina el sistema presencial con una plataforma digital, brindando lo mejor de los dos mundos.
«Siempre es necesario contar con una buena base formal de educación de inglés. Ya no sólo para temas laborales, sino incluso al momento de planificar un viaje al extranjero», asegura María Soledad Gutiérrez, Directora Ejecutiva de los Programas de Inglés de eClass, empresa que imparte cursos semipresenciales con contenidos online de Cambridge University Press.
Además, cuenta que hoy existen maneras novedosas entretenidas e informales, fuera de la sala de clases para practicar. «Nosotros incentivamos a nuestros alumnos a que siempre ejerciten el inglés. Hay algunos pubs donde se juntan ingleses y norteamericanos con personas que quieren practicar este idioma, lo que puede ser un buen dato previo a un viaje».
Según datos de Sernatur, durante enero y febrero de 2012, fueron más de 800 mil chilenos que salieron del país. Gran parte de ellos deben haberse encontrado con la realidad de que el inglés es el idioma de comunicación por excelencia, haciéndose indispensable tanto para relacionarse con el personal de servicio de hoteles, malls, hospitales; como para acceder a los medios de transporte, leer guías de viaje o entender información básica en museos y sitios históricos.
En definitiva, «armar un viaje y moverse en el extranjero siempre es más fácil sabiendo inglés. Yo les aconsejo que si quieren practicar, teniendo ya una base, se atrevan a hablar y pierdan la vergüenza. Aprovechen la oportunidad, ya que se aprende mucho en conversaciones informales. Si esta experiencia les sirvió y aprendieron más de lo que sabían, tomen un curso a su regreso para mantener los conocimientos adquiridos y continúen practicando», afirma Gutiérrez.
Por su parte, Cecilia García que para marzo 2013 tiene claro que sus destinos son Australia, Indonesia, Tailandia y Vietnam, les aconseja que «siempre lleven un cuaderno con palabras y preguntas claves para el aeropuerto, para los hostales e incluso, para integrarse con los amigos extranjeros».
Fuente: http://revistamujeres.cl/