Cualquier bebé que sobrevive a un nacimiento prematuro es considerado por sus padres un milagro. Pero para Kate y Renato Douse, su hija es muy especial. Por poco, Maddalena es uno de los bebés prematuros más pequeños que ha sobrevivido en el Reino Unido, y todo gracias a un par de tijeras.
Nacida con tan sólo 23 semanas de gestación, los médicos no estaban seguros de si iba a sobrevivir, o si debían tratar de salvarla.
Las actuales directrices éticas en el Reino Unido sobre el cuidado de bebés muy prematuros sugieren no proveer cuidado activo para los bebés nacidos a la semana 22 o antes de ese tiempo.
Pero cuando esta bebé fue puesta en la balanza sólo pesaba una libra, y era el peso mínimo para que un bebé fuera considerado viable, por lo que decidieron luchar para mantenerla con vida.
Según publica el Dailymail, fue cuando ella estuvo a salvo en el respirador, que los médicos descubrieron un par de tijeras que se había quedado accidentalmente en la balanza y que en realidad Maddalena sólo pesaba 382g.
Ahora, con seis meses de edad, ha sido dada de alta del Hospital Royal Sussex y se espera que crezca como una niña sana.
Los bebés prematuros que nacen alrededor de 24 semanas pasan a las unidades neonatales de cuidados intensivos, aunque sus padres suelen optar por la retirada de la atención en algún momento cuando el panorama médico para el niño empeora.
Fuente: http://informe21.com