Su creador, Barry Sears,reveló a Infobae América los secretos de este plan alimentario de culto: lo siguen Angelina Jolie, Julia Roberts, Sandra Bullock y Madonna.
Barry Sears (foto) no tiene el perfil tradicional de los creadores de dietas célebres. Pionero en biotecnología, investigador del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) y de la Facultad de Medicina de Boston, admitió, en su paso por Buenos Aires, que “los hábitos de alimentación son muy difíciles de cambiar”, y agregó que “siempre es más difícil agregar alimentos que quitarlos”. El primer paso para comenzar un régimen, dice, es tomar conciencia de que se tiene una mala conducta nutricional, debido a la vida agitada característica de las grandes urbes.
La “Zona” es una dieta equilibrada: 40% carbohidratos, 30% proteínas y 30% grasas. “Se basa en dirigir las reacciones hormonales de nuestro cuerpo mediante la ingesta de alimentos que resulten favorables a nuestro organismo”, explicó. Y de esta forma se ingresa a una “zona de equilibrio” que no sólo provoca pérdida de peso sino que también favorece un mejor rendimiento, mejora la agudeza mental y previene la aparición de enfermedades crónicas. Estrellas como Madonna, Jennifer Aniston, Brad Pitt, Cindy Crawford, y deportistas como Carlos Tevez y Tiger Woods ya la adoptaron.
Este programa nutricional se compone de frutas y verduras, y de la ingesta de proteínas magras como las del pollo o pescado, además de otras fuentes de energía como claras de huevo, tofu, porotos de soja y quesos. “No se miden las calorías sino las proteínas que cada persona necesita”, puntualizó Sears. En otro orden, recomienda utilizar las grasas monoinsaturadas- presentes en las aceitunas, el aceite de oliva o las almendras-, ya que producen una disminución importante del apetito.
Para Sears el éxito de esta combinación de alimentos como parte del menú diario radica en que se ingieren más carbohidratos que proteínas, convirtiendo la grasa almacenada en energía, y esto ayuda a conseguir un correcto equilibrio hormonal. El especialista calificó a Zona como una dieta para obtener una “vida saludable”. Si bien no se prohíbe ningún alimento, hay algunos más recomendables que otros. En cuanto a los carbohidratos blancos, como granos, cereales y harinas, aconseja comerlos con moderación al igual que no utilizar aceite vegetalen las comidas.
En la dieta para estar en “zona de equilibrio”, se aconseja realizar cinco comidas diarias: tres importantes (desayuno, almuerzo y cena) y dos snacks, todas ellas con la proporción adecuada de proteínas, hidratos y grasas. No deben pasar más de cinco horas entre cada una de ellas, ya que eso generaría mayor ansiedad en la próxima comida. El especialista indicó que, si en ese periodo no se siente hambre, entonces el interesado en perder peso va por el buen camino.
A modo de ejemplo, describió un desayuno ideal: una taza de café acompañada por una porción de queso (90 gramos) y una fruta. “Es fundamental equilibrar en cada plato las proteínas, los hidratos de carbono y las grasas”. Aconseja ingerir un pequeño snack antes de acostarse en el caso de haber cenado temprano. “Uno se va a dormir pero el cerebro no”, puntualizó.
“Es un plan que no tiene prohibiciones”, insistió, y a modo de ejemplo dio un tip para seguir en “zona” aun yendo a Mc Donalds: “Pedir el sándwich de pollo y la ensalada. A la hamburguesa quitarle el pan y agregarle una pequeña porción a la ensalada”, explicó Sears. De esta forma, en un plato hay hidratos y proteínas.
Este programa nutricional hace que disminuyan las hormonas causantes del apetito y que aumenten las que nos brindan sensación de saciedad. La base de la dieta radica en que el organismo use la grasa guardada para obtener energía. El plan debe ser complementado con un control del estrés y con actividad física. Para aquellos que, por falta de tiempo o porque no son proclives a realizar algún deporte, Sears aconseja por lo menos caminar 30 minutos al día o realizar de pie la mayor cantidad de actividades posibles.
Los países que mejor comen. Y los que comen mal. El pescado es parte fundamental de la ingesta diaria de los japoneses, por eso Sear sostiene que la nación asiática ostenta el mejor hábito alimenticio. Países mediterráneos, como España, Italia y Grecia, también integran el grupo de elegidos por Sears, ya que es común que sus ciudadanos incorporen vegetales, frutas y aceite de oliva en sus platos. En cuanto a la región, menciona a Chile como un ejemplo del “mal comer”. Reseñó que el país latinoamericano, figura segundo a nivel mundial como consumidor de pan y tercero, detrás de los EEUU y México, como consumidor de Coca-Cola.
Fuente: http://america.infobae.com