Las elecciones primarias nacieron como un método de selección de candidaturas para cargos públicos electivos; sin embargo, son pocos los partidos que presentarán distintas alternativas para competir por un mismo puesto en octubre.
El caso emblemático es el de UNEN, en la Ciudad de Buenos Aires, que presentará cuatro listas. También habrá internas en Compromiso Federal y en el Movimiento.
Este año, en las primarias se votarán precandidatos a competir por un lugar en el Congreso. Hay distritos en donde se renueva la integración de las dos cámaras del Congreso y otras en donde sólo se elegirán diputados –provincia de Buenos Aires, por ejemplo–.
Existe una creencia popular de que no se puede cortar boleta en las primarias, pero no es así. La ley es clara y prevé que los electores están habilitados a elegir una lista completa o cortar por categoría de cargos, tanto entre listas internas de un mismo partido como de diferentes agrupaciones.
La opción de cortar boleta entre distintos partidos estará disponible en las ocho provincias donde se eligen en simultáneo senadores y diputados, ya que en el resto de los distritos sólo se deberá introducir una boleta para cargos nacionales –diputados–.
Al ingresar al cuarto oscuro, los electores se encontrarán con boletas de distintos colores, cada una de ellas correspondiente a un partido o una alianza. Como sucede en las elecciones generales, las boletas tendrán distintos cuerpos de acuerdo a las categorías –diputados, senadores– y el elector podrá votar por una lista de precandidato para cada una de las categorías.
Lo que no se puede hacer en el cuarto oscuro es elegir dos precandidaturas para el mismo cargo. En ese caso, el voto será considerado nulo. A continuación, se ilustrará con ejemplos qué se puede hacer y qué no en la Ciudad de Buenos Aires, donde se votarán precandidatos a diputados y senadores.
Cómo quedan conformadas las listas
La lista definitiva que competirá en octubre con candidatos a la Cámara de Diputados quedará integrada de acuerdo al sistema de distribución elegido por la carta orgánica de cada partido. Por ejemplo, el frente porteño UNEN implementará un sistema de reparto proporcional para definir el orden de los candidatos basándose en la fórmula electoral D’hondt.
Los integrantes de UNEN resolvieron además un requisito para lograr ingresar en este sistema de reparto: la lista que no llegue al 22% de los votos totales que obtenga el frente en las PASO no podrá reclamar lugares en las nóminas definitivas.
Fuente: http://www.infobae.com/