En la mitad de la carrera de Singapur, Michael Schumacher le pegó al francés Jean-Eric Vergne y por eso el hombre de Toro Rosso se quedó afuera de la carrera.
Entre ellos quedó todo bien. De hecho, Vergne se bajó del auto y aceptó las disculpas del múltiple campeón alemán que le palmeó la espalda.
Después de esa infortunada maniobra en la que Schumi declaró que él apretó el freno, pero que no sabe «qué pasó». La FIA le aplicó una sanción de diez puestos en la grilla de partida de la fecha que viene.
No obstante, la prensa alemana no se calló, todo lo contrario. «¿Qué demonios está pasando con Michael Schumacher?», se preguntaba el rotativo Hamburger Abendblatt al poner que el accidente del alemán en Singapur fue el tercero en tres años bajo las luces artificiales del trazado asiático (en este video se ve el toque a Sergio Pérez el año pasado).
El expiloto de Ferrari no sólo fue criticado por ese choque. También lo fue por haber estado en el baño cuando el resto de la Fórmula 1 homenajeaba en silencio a Sid Watkins, histórico médcio de la categoría, recientemente fallecido. «Toda la F1 está ahí con un gran respeto», señaló el comentarista de la RTL Christian Danner. «Pilotos, jefes de equipo, incluso el primer ministro de Singapur», agregó Danner, quien acusó que la ausencia de Schumacher fue «bochornosa».
La prestigiosa revista Auto Motor und Sport, publicó : «los neumáticos perderían presión después de la salida del auto de seguridad; es un piloto experto, ya debería saber. Otros pilotos, con menos experiencia, no sufrieron con el mismo problema». El diario Bild también hizo críticas Schumacher, resaltando que el accidente sólo «coronó un fin de semana desastroso».
Fuente: http://ar.deportes.yahoo.com