El colombiano Henry Jesús López Londoño, alias «Mi Sangre«, será defendido por el mismo abogado que patrocinó a «Ricky«, padre del artista, en la causa por contrabando de efedrina, informó el Diario Crónica.
No perdió tiempo. El capo narco colombiano Henry Jesús López Londoño, alias “Mi Sangre”, contrató como abogado defensor a Carlos Olita, quien supo hacerse cargo de la defensa de Ricardo “Ricky” Martínez -padre del actor Mariano– en una causa por supuesto tráfico de efedrina.
Además se conoció que cuando fue detenido en un exclusivo restaurante de Pilar estaba por cerrar un acuerdo con el cártel mexicano “Los Zetas” de envío de droga y el pago de 600.000 dólares.
Olita se hizo cargo de la defensa de López Londoño, quien ahora afronta un pedido de extradición de Florida, EE.UU, por actividades vinculadas al narcotráfico. El letrado defendió al padre del actor Mariano Martínez, quien se vio envuelto con una organización de mexicanos que utilizaban la efedrina como precursores químicos.
En esa causa, “Ricky” Martínez fue condenado a la pena de cuatro años de prisión como partícipe necesario en el contrabando de sustancias que pueden afectar la salud pública.
López Londoño fue detenido el martes en Pilar, luego de pedidos de arresto con fines de extradición de abril de este año. Ahora, afrontará un juicio con este motivo, al ser acusado de tráfico de drogas.
Y lo pudieron localizar al instalar los investigadores cinco localizadores a sus autos para seguirlo. El rastreo de valijas con dinero, que llegaban a Colombia incluso por Centroamérica y que luego eran enviadas a Argentina, y chips instalados en sus lujosos autos llevaron a las policías de ambos países hasta el narcotraficante López Londoño. Para su captura también ayudaron un empresario argentino y un miembro de la banda Los Urabeños.
«Mi Sangre” iba en su coche Audi con su jefe de seguridad, “Jorge”, camino a cumplir una cita con emisarios del cártel mexicano de Los Zetas. El encuentro, según la policía, era para concretar el envío de droga y el pago de 600.000 dólares.
Los pesquisas de ambos países detectaron los lujosos autos del narco. Estratégicamente, desde hace dos meses, instalaron en ellos cinco dispositivos de localización. Lo hicieron en estaciones de combustible y simulando controles de tránsito. Así conocían por dónde se movían, pero no tenían certeza del vehículo en el que viajaba el narco, quien ya se había fugado en una operación en un conocido hotel. Entonces, decidieron esperar que el narco cumpliera la cita con el cártel de Los Zetas.
Las autoridades aseguran que desde la Argentina López Londoño coordinaba los contactos con la mafia y el envío de mucho dinero para sus socios de Los Urabeños. Por eso el general colombianoJosé Roberto León Riaño, director de la policía, dijo que “los Urabeños han perdido al principal financiador”. Precisamente, rastreando ese dinero, la policía colombiana tuvo las primeras pistas de los movimientos de “Mi Sangre” por el continente.
Fuente: http://www.cronica.com.ar