Desde la idea de que controla tu mente, hasta que te obligan a hacer algo inimaginable.
La hipnosis está repleta de mitos y leyendas que alimentan el misterio y el halo paranormal de esta técnica. Aquí enumeramos todos los que hay que desterrar.
1. No es cierto que una alta capacidad de ser hipnotizado sea sinónimo de voluntad débil ni de poca inteligencia.
2. La hipnosis no es indefinida. Si el hipnotizador dejase al paciente en estado hipnótico éste entraría en un estado de sueño normal y despertaría sin secuelas.
3. El sujeto hipnotizado no puede ser obligado a violar sus hábitos de conducta habituales. En caso de algún exceso de este tipo, el sujeto puede despertar espontáneamente. Así lo afirma José Luis Vázquez, vicepresidente de la Federación Mexicana de Hipnosis:
La técnica hipnótica tiene una limitante y es que no te puedes saltar la escala de valores morales del individuo. Si yo hipnotizo a alguien y le digo que agarre una pistola y mate a tal persona, no lo hará a menos que sin hipnosis también lo haga”.
4. No es cierto que se pueda hipnotizar a cualquiera en contra de su voluntad y el sujeto quede bajo el control del hipnotizador. Al final, toda hipnosis es autohipnosis. La hipnosis no puede inducirse sin la colaboración del sujeto. Ellos mantienen su capacidad de control sobre su comportamiento.
5. No se puede lograr la levitación por hipnosis, aunque sí se puede lograr una rigidez del cuerpo que permita movilizarlo sin variar la postura inicial. Esto se consigue por coordinación y refuerzo del tono muscular por sugestión. Es la catalepsia.
6. La hipnosis no implica una pérdida de la conciencia y no es una forma de sueño.
7. La hipnosis puede ser peligrosa. Lo mismo que sucede con cualquier técnica, el uso de la hipnosis puede tener consecuencias imprevistas. Por esta causa, sólo la deben utilizar profesionales calificados. No es aconsejable en enfermos esquizofrénicos o con psicosis.
8. La hipnosis no consigue confesiones de infidelidad ni formas de encontrar objetos perdidos:
Muchos son los que llegan a consulta pidiendo que hipnoticen a su pareja para sacarle la sopa o para encontrar el coche que no recuerdan dónde dejaron estacionado”, asegura Vázquez.
Fuente: http://quo.mx/