Una nota que publica el sitio www.consumer.es analiza pormenorizadamente los beneficios de las técnicas físicas que se utilizan asiduamente para ejercitar el cuerpo.Entrenar en casa, hacerlo con un preparador físico, usar plataformas vibratorias o hacer ejercicio con pesas, ¿qué es más conveniente?
Hacer ejercicio físico con máquinas bajo las pautas de un profesional
«Cada persona tiene sus capacidades y limitaciones y, antes de practicar cualquier entrenamiento, debe conocerlas y saber si padece alguna enfermedadcardiovascular, pulmonar, endocrina o metabólica, mediante evaluación médica. Este asesoramiento clínico es útil para cuando se acuda a una instalación deportiva ydebe conocerlo el profesional independiente que después aconsejará sobre el uso de los equipos», explicó Salvador Pitarch, fisioterapeuta del Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV).
Para la investigadora de esa institución Mercedes Sanchís, la ayuda de un profesional es imprescindible. “Debe asesorar sobre las cargas, los ciclos y las repeticiones con las que se ha de trabajar, las tablas de ejercicios y las posturas. Éstas varían en función del objetivo de la persona, que puede ser perder peso, muscular o tonificar; y según esto, se le recomendará trabajar con más peso y menos repeticiones o hacer más repeticiones con menos peso», aconsejó la experta.
Máquinas para hacer ejercicio: saludables con matices
«Son muy beneficiosas utilizándolas de manera idónea bajo el asesoramiento de un entrenador personal o de una persona con conocimientos previos. Ayudan a mejorar la fuerza, la potencia o la resistencia, según el objetivo elegido», sostuvo Laura Feliu, licenciada en el Instituto Nacional de Educación Física (INEF), coordinadora del departamento deportivo de Holme Place Balmes.
Las máquinas son de gran utilidad para quienes sufren alguna lesión, sobrepeso o un peso excesivo y para quienes no pueden mover ciertas partes del cuerpo onecesitan mejorar su movilidad y hacer rehabilitación.
Practicar ejercicio con plataformas vibratorias
Este tipo de máquinas emiten vibraciones constantes que el cuerpo asimila, que, desde el punto de vista de trabajo, resultan más beneficiosas. «Es como si el usuario tuviera un peso externo -pero sin soportarlo-, lo que facilita la labor con personas lesionadas que no podrían cargar peso. También permite acelerar los resultados del entrenamiento, ya que activa las fibras más rápido y mejora la capacidad muscular«, sostuvo Feliu.
No obstante, Pitarch advirtió que «las vibraciones que emiten se trasladan por todo el cuerpo y, aunque se conocen más sus mecanismos de acción y efectos sobre el sistema musculoesquelético, todavía se investigan los posibles efectos sobre el sistema cardiocirculatorio y nervioso«.
Consejos al adquirir equipos deportivos
Cuando se prefiere hacer ejercicio en el hogar, también hay que tomar ciertos recaudos con las máquinas. Los especialistas recomiendan asegurarse de que no sean falsificadas, averiguar su procedencia, calidad y base científica, indica Feliu. “Deben contar con un certificado de las normas UNE o ISO en su etiquetado, que garanticen que no tienen aristas vivas que puedan cortar a los usuarios, ni puntos donde se pueda quedar atrapado, ni que exista la posibilidad de agarrarse los dedos con las pesas, que sean estables y no se puedan volcar, entre otras medidas de seguridad”, explicó Sanchís.