Existe una serie de comportamientos, decisiones y actitudes al momento de criar un hijo que, lejos de ayudarlo, sólo lo pueden perjudicar. A ver con cuántas nos identificamos.
1- Empezó su vida, se acabó la tuya
Cuando el niño nace es normal que mamá y papá estén pendientes de todo lo que le sucede. En poco tiempo la frase «mi sol» cobra real validez ya que todos giran en torno a él.
Acto seguido todos dejan de lado todo: la pareja, la salud, actividades deportivas y juntadas con amigos entre otras cosas.
Consecuencia: un niño al que le será difícil decirle que no a algo y que tendrá enormes dificultades para compartir cosas en grupo.
2- Caprichos all inclusive
Sí a todo. El niño debe crecer según su naturaleza. No hay que ponerle límites. Con tal que no llore hay que darle lo que quiera. ¡Error!
No hay nada peor que convertir a un niño en un pequeño dictador con el que no se puede negociar nada y lleva siempre las de ganar. Los límites son necesarios y no deben ceder ante ningún berrinche. Cuando sea grande lo va a agradecer.
3-Mi hijo es un genio
La maestra miente, lo agarró de punto o no sabe nada. En la casa no hace lo que dicen que hace en la escuela. Lo que pasa es que el nene está para más. Hay que buscarle un colegio para superdotados porque en el que está no lo entienden.
Típico. Los nenes y nenas son genios incomprendidos que no encuentran nada que esté a su nivel en este mundo.
Si no se identifica este erróneo punto de vista rápidamente, los chicos tienen como destino una estadía gratis yeterna en la punta de una solitaria montaña de ego. Patético.
4-Superstar
En todo momento y lugar el nene o la nena es el número estelar. Su omnipresencia no se discute nunca. Pueden jugar al fútbol con personas más grandes que él (y su padre creerá que el nene es Messi) u opinar libremente en las conversaciones de adultos (aunque el tema sean las perversiones sexuales más aberrantes de la historia).
Las cosas en su lugar. Los chicos no son superestrellas ni tienen por qué serlo. Deben vivir su edad y su mundo evitando mezclarse con los adultos.
5-Bueno, que termine mañana
Nada más erróneo que permitirle licencias para todo. Hoy comió poquito, mañana comerá más. Se quedó dormido sin ordenar los juguetes, que lo haga mañana y así.
La fuerza de voluntad debe cultivarse fuertemente en los chicos y las actitudes en este sentido deben premiarse.
Fuente: http://www.diariouno.com.ar/