No es verdad que ya no hay hombres, ni que todos sean iguales y, menos aún, que ninguno quiere compromisos. Basta con mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta que, al igual que nosotras, ellos tampoco quieren estar solos y también buscan una compañera de vida.
Pero para algunas mujeres -al igual que en el caso de algunos hombres- conseguir una relación estable y duradera se termina convirtiendo en un frustrante camino que transitan con mucha angustia y que siempre termina del mismo modo: solas.
“Sabemos que no es fácil encontrar pareja y ello se debe a múltiples factores, como dificultades internas o subjetivas que pueden impedir el armado de una relación, y a otros que provienen del mundo exterior. Sin duda, las personas que están sin pareja reciben presiones del afuera, que le dicen “¿otra vez sola?”, “¿ningún novio”? Entonces la presión social-familiar se convierte en un mandato difícil de desobedecer, al punto de no poder darse cuenta si es deseo propio o deseo de cumplir con el mandato impuesto”, explicó la psicóloga, Adriana Guraieb, en una entrevista con Infobae.
Algunas estadísticas aseguran que, luego de una ruptura amorosa, los hombres buscan formar otra pareja antes que ellas, no solo porque no les gusta estar solos sino también por situaciones de comodidad en lo que se refiere a las tareas de la casa,ya que muchos han sido educados por madres que se dedicaron a las tareas domésticas y buscan, a imagen y semejanza, alguien que se ocupe de esos menesteres.
“Después de terminar una relación ellas prefieren apegarse a sus amigas, quienes les brindan un sostén emocional que no suele darse en la amistad entre varones. Además,aquellas mujeres separadas y con hijos, tardan más tiempo que ellos en armar otra relación, porque no tienen la misma libertad para salir, tomar algo, pasear y conocer gente nueva, dado que el rol de madre las lleva a ser más cautelosas, a preguntarse si el hijo está preparado para aceptar a una persona al lado de ellas. Esta situación no la vive el hombre separado o divorciado, que está más libre para seducir, salir del trabajo y hacer un after-office, lo que posibilita a quien lo desee, involucrarse con otra pareja en menor tiempo que la mujer”, sostuvo Guraieb.
La especialista destacó que, a la hora de volver a empezar, ellas privilegian la búsqueda de hombres compañeros y fieles, mientras que ellos buscan a la mujer atractiva con buen cuerpo y seductora.
Actualmente, muchas mujeres le dan prioridad a su desarrollo profesional, laboral y personal, lo que hace que les quede poco espacio psíquico interno y tiempo real para emprender la búsqueda de una relación. Es que algunas disfrutan la soledad y la eligen porque pueden manejar su vida a su antojo y no están atadas a nadie.
“Pero aquellas que viven la soledad como falta o carencia y buscan incesantemente una pareja estable sin poder conseguirla deberían preguntarse qué es lo que realmente quieren. ¿Estamos haciendo algo para dejar de estar solas? ¿Estamos a la espera de que la pareja llegue del cielo? Es importante darse cuenta si nuestros deseos van de la mano con nuestras acciones o, por el contrario, si van por caminos diferentes y a veces contrapuestos”, aseguró Guraieb.
La experta recomendó tratar de no idealizar a las personas con las que se inicia una relación, resolver conflictos que quedaron de relaciones anteriores para no depositarlas en el vinculo actual, cambiar de elección si las anteriores parejas eran parecidas y no fueron buenas. ”Si busco una pareja estable, no es la mejor idea tratar de lograrla con un seductor, que no desea un compromiso emocional”, agregó.
Lo importante es no quedarse en casa y salir a buscar, ya que muchos espacios impensados pueden ser una gran posibilidad para conocer a alguien interesante. Ir a bailar, a cenar, a ver una muestra de arte, al gimnasio, hacer un curso de idioma y hasta aceptar presentaciones de amigos son opciones que no se deben descartar: el amor puede estar esperándonos en el lugar menos pensado, solo queda en nosotras salir a buscarlo.
Fuente: http://www.infobae.com/