Localizada en el mismo piso donde vive el vicepresidente Amado Boudou, era uno de los lugares más seguros para cambiar dólares y hacer operaciones de carácter financiero. Qué la diferenciaba de otras «cuevas»
En el 7º C del Edificio Madero Center, en Juana Manso 555, se realizaban operaciones financieras hasta que trascendió la denuncia por lavado de dinero, emitida por el programa de Jorge Lanata.
Dificilmente el lugar puede ser blanco de «salidera». Cuenta con numerosas medidas de seguridad y tiene un garage en el cual se puede estacionar, por lo que puede cargarse cualquier bolso o valija prácticamente sin riesgos de asalto.
A diferencia de cualquier «cueva» del Microcentro, el departamento en cuestión está ubicado en el exclusivo centro de negocios. Según comentó uno de los habitués al diarioEl Cronista, para ser atendido era necesario tener la recomendación de algún cliente. Además, había que comunicarse desde el propio celular, a modo de chequeo para verificar quién era el interlocutor del otro lado. Caso contrario, nunca atendían.
Este domingo, Leonardo Fariña le dijo a Jorge Lanata que en el kirchnerismo se conoce al Madero Center como La Rosadita. Según su relato, altos funcionarios del gobierno nacional concurren a esa «cueva», entre los que figuran el ministro de Planificación, Julio de Vido, quien allí cerraría licitaciones de obra pública. Además, coincidencia o no, en el mismo piso donde supuestamente se realizaban operaciones de lavado de dinero vive el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, en el departamento I de la unidad 219.
Por su parte, Federico Elaskar, ex propietario de la financiera SGI que trabajaba en La Rosadita, denunció que desde el Madero Center hacián la escala técnica de la plata negra que provenía del Sur: allí era remitida a Suiza a través de Montevideo, dividida en cuentas de 1,5 millón para bajarle el perfil a las operaciones y que no sea blanco de sospechas.
Los servicios que se ofrecen en La Rosadita“emprolijan” las facturaciones en negro que muchas empresas realizan en el país. La actividad no registrada por las compañías no puede pasar por el clearing bancario, lo cual daría lugar a sanciones por parte dela AFIP. Entonces, la avivada consiste en cambiar en las cuevas cheques al día, con un costo de comisión ronda el 2,5 %. Estos precios rigen para el ámbito de la ciudad de Buenos Aires, mientras que en el interior se elevan al 3 % por el traslado.
Otro de los negocios de La Rosadita era el descuento de cheques. Mientras que en bancos y otras entidades financieras puede alcanzar un costo del 32%, en Madero Center ese servicio llega al 52 % anual.
Por último, una de las especialidades de la cueva VIP era el “dólar cable”, el nombre con el que se conoce el giro de dinero al exterior de manera ilegal. La remisión de metálico puertas afuera del país tenía una comisión del 4 %. En el caso de que si se requería ingresar moneda extranjera desde el extranjero, el costo era del 1 % del monto total de la operación.
Tras las mayores regulaciones para evitar el egreso de divisas, la comisión para girar dinero al exterior trepó en noviembre pasado al récord del 7 %, pero al no haber ahora operaciones debieron bajarla apenas al 3 %, en caso de que se decida remitir capital dinerario a Uruguay, y al 3,5 % para otros países. En todos los casos, se trata de transferencias de alto valor, que superan los 100.000 dólares.
Fuente: http://www.infobae.com