La mujer, de 20 años sufrió graves lesiones y, a pesar de las operaciones a las que fue sometida, las secuelas quedaron a la vista cuando se presentó en un programa televisivo.“Me siento bendecida de estar viva, soy la misma persona pero más fuerte y quiero decirle a mi atacante que se puede quemar mi piel, pero no se puede quemar mi alma”, declaró en el ciclo de Philip Schofield según una nota que publica el periódicoDaily Mail.
Nomi Oni fue atacada por otra mujer en Londres, Inglaterra, cuando salía de su trabajo. Se cree que la victimaria lo hizo porque quería castigarla por el solo hecho de trabajar vendiendo lencería. Sin embargo, por el momento las autoridades no han podido dar con el paradero de la agresora.
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