Policías que buscaban a un hombre desaparecido en Alemania se sorprendieron al encontrarlo muerto en su casa, rodeado por más de cuarenta serpientes gigantes.
Muchos de los reptiles, incluyendo una anaconda de 9 metros y cuatro pitones de 8, se deslizaban de forma libre en todo el cuerpo en descomposición, cuando la policía entró en el apartamento de un fanático delas víboras, identificado como Heiko Rieder, en Straubing, Alemania.
Un portavoz del servicio de bomberos, dijo: «Por lo menos una de las serpientes era tan gruesa como un muslo humano».
Colegas de Rieder, preocupados por la desaparición, alertaron a la policía después de que el cuidador, de 40 años, no acudiera a trabajar durante una semana.
Se cree que murió de un ataque al corazón, mientras le dabade comer a sus animales domésticos.
Los expertos creen que sólo se salvó de ser comido porque era demasiado grande para ser tragado entero.
El jefe del centro de reptiles Markus Baur, ahora a cargo de las serpientes, dijo: «Probablemente no lo comieron por dos razones: una, que prefieren sus presas vivas para empezar. Y dos, que les gusta comer su presa entera y el adulto medio europeo es demasiado largo para eso».
En total, 46 serpientes, algunas en tanques, se recuperaron de la propiedad, publica el diario británicoThe Sun.
Un portavoz de la policía dijo: «Su cuerpo se descompuso rápidamente por el calor procedente de las serpientes No parece haber ninguna circunstancia sospechosa».
Fuente: http://www.cronica.com.ar/