Después de haber dejado un tendal de deudas millonarias con Rosstoc, la productora que armó «en un momento de consumo» de cocaína, Gastón Pauls volvió a dedicarse a producir contenidos televisivos. Pero esta vez cambió de nombre: su nueva empresa se llama Taha, y figura bajo control de su esposa, la actriz Agustina Cherri, y logró un millonario contrato con el gobierno de Chaco, informó esta semana la Revista Noticias. Ahora, esos millones están en la mira de la Legislatura.
Taha SA, creada por Cherri en La Rioja poco antes del quiebre de Rosstoc, produce la tira «Historias Sencillas» para la provincia de Chaco, gobernada por el kirchnerista Jorge Capitanich. Gracias al decreto 992, firmado el 16 de mayo de 2011, el Estado provincial decidió pagarle a la empresa unos 2.589.073 pesos, en nueve cuotas, por la realización de ocho episodios televisivos de 26 minutos cada uno.
A pesar del carácter público de los documentos estatales, la actriz «firmó un contrato de tipo confidencial con (el área de) Cultura de la Provincia», cuyos detalles específicos se desconocen. El motivo: «Ya no se puede acceder a las primeras cinco cláusulas», denunció el diputado provincial Livio Gutiérrez.
«Estamos presentando pedidos de informe ya que no se concibe que un contrato firmado por Cultura de la provincia se considere secreto y no esté expuesto a la luz de la opinión pública», comentó el legislador, quien también cuestionó que la provincia firmara un contrato similar por 1.300.000 pesos con el actor Víctor Laplace.
«Si tanto les interesa la cultura, que lo demuestren apoyando a artistas chaqueños, que están absolutamente desprotegidos por el Estado y se les hace imposible mostrar su arte, o a tantas salas de teatro que muchas veces deben cerrar sus puertas por no recibir apoyo oficial y que, en el mejor de los casos, continúan funcionando gracias a la solidaridad ciudadana», concluyó Gutiérrez.
La defensa de Capitanich. «La producción de contenidos audiovisuales tiene un valor, y se traduce en un precio del mercado», justificó el gobernador, quien argumentó que la serie televisiva «puede atraer muchas inversiones».
«El partido Boca-River permitió que en 50 países del mundo se mencione la palabra Chaco; el partido Argentina – Brasil tiene un impacto similar. Todo eso tiende a garantizar mejores condiciones para la provincia», argumentó Capitanich.
Historia de deudas. En julio de 2010, Perfil.com reveló que Gastón Pauls y Rosstoc SA (responsable de la tira «Ciega a Citas», emitida por Canal 7), adeudaban más de cuatro millones de pesos en cheques rebotados. La cifra se duplicó cuando la empresa presentó la quiebra, en diciembre de ese año.
Más tarde, la Justicia ordenó a Pauls que pague sus deudas, que trepan a 14 millones, con el fruto de su trabajo como actor. Enseguida, el frustrado empresario se hizo habitué de todo acto oficial que pudiera estar ligado con la cultura y el arte. Más tarde confesaría que armó su productora en una época en la que consumía cocaína, para justificar los desmanejos financieros de la empresa.
Pero antes de que eso ocurriera, Pauls ya se había hecho de amigos en el oficialismo. No sólo nacional (apareció en primera línea en varios actos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner) si no también en Chaco: allí, en el pueblo de La Clotilde estaba por comenzar a grabar la tira «Conurbano» para Canal 7, con apoyo de la Lotería Provincial, cuando le llegó la quiebra de su productora.
Semanas antes, Cherri fundó TAHA SA. Allí, Pauls abrió un sugestivo concurso de acreedores, interpretado en la Justicia como una forma de impedir reclamos según la última edición de la revista Noticias. El actor no figura en el directorio de la empresa, pero sí su mano derecha, Damián Armocida.