Hay una nueva tendencia entre los adolescentes que buscan drogarse, según los médicos, e involucra un insólito artículo de casa diseñado para mantenernos libres de gérmenes: desinfectante para manos a base de etanol.
Los adolescentes están usando esto como droga, de acuerdo con funcionarios de salud. Los centros de control de envenenamientos en todo Estados Unidos dicen que los informes están aumentando.
El gran problema aquí es el contenido de alcohol, dice el médico Robert J. Geller, un toxicólogo y pediatra en la Universidad Emory en Estados Unidos.
Dice que estos desinfectantes, “son en realidad productos que tienen 60% de etanol, que significa que tienen 120 grados en graduación alcohólica y (…) si bebes 59,1 mililitros de este, es como si bebieras 88,7 mililitros de un tequila de 80 grados de graduación alcohólica»
En California, donde el rumor acerca de esta tendencia apareció por primera vez, ha habido reportes de 60 adolescentes expuestos desde 2010, dice el médico Cyrus Rangan, toxicólogo y director asistente en la oficina de Control de Envenenamientos de California, Estados Unidos.
En meses recientes, médicos del condado de Los Angeles se han percatado de un aumento en los casos, así que la semana pasada pidieron al Centro de Control de Envenenamientos en California hacer los cálculos para ver si los datos correspondían a sus instintos.
Pero las estadísticas en el país no han sido compiladas, así que CNN pidió a la Asociación Americana de Centros de Control de Envenenamiento en Estados Unidos (AAPCC, por sus siglas en inglés), revisar su base de datos.
Resulta que los números de casos alrededor del país también están aumentando.
El año pasado hubo 622 llamadas involucrando casos donde los adolescentes reportaron una exposición al desinfectante de manos con base en el etanol, de acuerdo con la AAPCC. Hasta ahora en este año, ya han recibido 203 llamadas.
Las especificaciones de cada caso no se conocen, pero en total, “el 77% de las exposiciones de adolescentes a los desinfectantes de mano son orales; el resto fueron principalmente en los ojos y piel”, dice Loreeta Canton, vocera de la AAPCC.
Ninguno de los informes involucrando sanitizantes de manos resultó en la muerte de jóvenes, aunque un reporte de 2011 involucró a un adolescente “con efectos importantes que ponían en peligro su vida”, de acuerdo con la AAPCC.
También en 2011, hubo 14 adolescentes con “efectos moderados” que necesitaron tratamiento y no eran casos que ponían en peligro su vida, y 122 casos de adolescentes con “síntomas menores” que fueron “mínimamente molestos y generalmente resueltos rápidamente”, dice la AAPCC.
Hasta este año, los centros de envenenamiento han recibido un solo informe de un incidente con el desinfectante de manos que “puso en peligro su vida (de un adolescente) o resultó en discapacidad o desfiguramiento”, un incidente que “requirió tratamiento, pero no ponía en peligro su vida” y 48 que fueron “mínimamente molestos y fueron resueltos rápidamente”.
Para los adolescentes, las consecuencias pueden ser graves, dice Geller, desde sedación, vómitos hasta respiración lenta, “realmente depende de cuánto hayan tomado y cuán seguido estén haciéndolo”.
La médico Jennifer Shu, una consultante de CNN y pediatra en Atlanta, dice que este no es un nuevo concepto para los adolescentes, es sólo un nuevo producto para que ellos prueben. Dice: “cuando son usadas de la manera equivocada, muchas de estas cosas pueden tener consecuencias no deseadas”.
El etanol puede interferir con el funcionamiento normal del cuerpo y los efectos secundarios pueden ir desde la sedación, pérdida de coordinación hasta el tiempo de reacción, advierte el médico Carl Baum, un pediatra de emergencias y un toxicólogo médico. “Mucho etanol puede llevar a descensos peligrosos en el azúcar de la sangre”, igual que cuando se bebe mucho alcohol.
Los adolescentes están siendo expuestos a través de amigos y encontrando recetas en línea que ayudan a hacerlo más delicioso, dice Rangan. Algunos adolescentes incluso añaden ingredientes para separar el alcohol del resto del gel, mientras que algunos lo diluyen.
Beber sanitizante de manos tiene el mismo riesgo que beber alcohol para niños, dice Rangan. “Considéralo como considerarías cualquier otro medicamento en tu casa y monitorea la cantidad en tu casa”. Por ello, sugieren a los padres usar desinfectantes en espuma que podrían ser un poco menos atractivos para que los adolescentes los utilicen de manera recreativa.
“Creo que es sólo por su fácil accesibilidad”, dice, “los adolescentes que están mostrando comportamientos intencionados de beber sanitizante de manos en un esfuerzo para emborracharse necesitan ser evaluados sobre por qué están haciendo esto, y este es un síntoma de un problema más grande de abuso de sustancias”.
Fuente: http://cnnespanol.cnn.com