Video: funcionario mexicano humilla un niño huérfano

El video titulado ‘Abuso de autoridad’ dura sólo 36 segundos y en menos de 24 horas ya ha sido visto por más de 750.000 personas y ha indignado a todo México. Los usuarios de la red social YouTube afirman que la escena es un ejemplo de cómo se ejerce el poder en el país y de la prepotencia de muchas autoridades públicas.

La grabación muestra a un funcionario del ayuntamiento de Villahermosa, en Tabasco, que ‘decomisa’ unas cajetillas de tabaco a un niño que se gana la vida como vendedor ambulante y le obliga a tirar al suelo todos los dulces que lleva en su cesta. El pequeño llora desconsoladamente y termina de rodillas en la calle.

Un camarógrafo de la televisión local TVX, Carlos Góngora, fue quien captó la escena y contó luego cómo la humillación del menor, originario de Chiapas, se había iniciado antes de comenzar a grabar.

“Este cuate, desde que lo vi, lo empezó a extorsionar y a molestarlo. Llegó al grado de que lo jaló la canasta y el niño se aferró y lo llevó arrastrando con todo y canasta, mientras él caminaba. Entonces lo enfrenté y le pregunté por qué se lo llevaba y me dijo que por los cigarros”, explicó al diario mexicano Milenio.

“Dijo que era de fiscalización y que se lo tenía que llevar, opté por empezarlo a grabar, en ese lapso fue que lo arrastró con todo mientras le decía al niño que mejor tirara los dulces porque lo iba a remitir con todo lo que traía, ante lo cual el niño optó por hacer caso. Al ver que la gente le empezó a gritar y más que lo estaba grabando, este cuate se sintió intimidado y lo soltó”.

Identificado como Juan Diego López Jiménez, el funcionario es un inspector del gobierno municipal que fue separado de su cargo tras la difusión de un “hecho lamentable que agravia y vulnera los derechos humanos de los niños”, según un comunicado del ayuntamiento.

La Comisión de Derechos Humanos del estado anunció que interpuso una queja de oficio por este abuso de autoridad. Sus trabajadores lograron localizar al pequeño y a una tía suya con la que vivía. Se trata de un indígena chiapaneco que no habla bien español y con el que se tuvieron que comunicar mediante un traductor. La comisión le ofreció apoyo médico, psicológico y jurídico.

Fuente: http://america.infobae.com/